liburudenda
librería
2013-02-23
ANTI- Liburudenda, 20:00h
C/ Dos de Mayo, 2. 48003 Bilbao.
El próximo sábado 23 a las 20h tendremos a las artistas Álvaro Icaza y Verónica Luyo para presentar su publicación “Cubrir una cosa con otra” que inaugura su proyecto de edición independiente con base en Lima.
_
Cubrir una cosa con otra, proyecto gráfico de Álvaro Icaza, se puede explicar a grandes rasgos como un catálogo / abecedario de pliegues. Los 17 dibujos recopilados han sido hechos a partir de fotografías publicadas en la sección de policiales de diferentes medios de comunicación. Al eliminar el contexto de la fotografía, los dibujos nos presentan la parte de la escena a la que no podemos acceder.
Cubrir una cosa con otra es el primer trabajo de un proyecto editorial radicado en Lima (colaboración entre Álvaro Icaza y Verónica Luyo) que busca dar a conocer propuestas gráficas pensadas para explorar el formato de publicación impresa.
Datos técnicos:
Impresión offset plegable blanco y negro. 71 x 50 cm. Caja impresa en serigrafía.
–
+@:
www.alvaroicaza.com
–
–
2013-02-21
ANTI- Liburudenda, 20:30h.
C/ Dos de Mayo, 2. 48003 Bilbao.
El próximo jueves 21 de febrero, a las 20:30 Haizea Barcenilla y Viviana Cecchia abrirán a la conversación “Not (Yet) A Manifesto” el proyecto del colectivo curatorial y plataforma de discusión Vessel.
_
NOT (YET) MANIFESTO
Nos estamos implicando en colaborar en una discusión para activar una práctica crítica alternativa que responda a nuestro tiempo actual, que a menudo parece una economía conducida por el mercado… Cuando lo que se necesita es más compromiso cívico.
En la crítica del pasado se ha dado una lógica binaria en la que el régimen neo-liberal y las ideologías izquierdistas se han revelado inefectivas. Así creemos que las instituciones tienen que salir de esta dualidad para estar al tanto de las paradojas actuales que se entrelazan en la forma contemporánea de producir cultura.
En particular nos gustaría desafiar la noción de prácticas colaborativas: ¿Cómo es posible que nuestro medio actual -un régimen completamente cautivo del capitalismo- abra una crítica desde medios de producción cultural colaborativa frente a la retórica del “consenso” de las democracias neo-liberales? Y más allá, ¿Cómo pueden las prácticas curatoriales ser el espacio para experimentar estrategias diferentes por una política más progresista de colaboraciones? ¿Qué significa “hacer juntas”?
Para responder a tales cuestiones hemos enfrentado el formato de un manifiesto, cuya plataforma nos puede ofrecer una herramienta a través de la que nos gustaría incorporar “múltiples voces y perspectivas”. Aunque este formato historicamente ha sido destinado a ser una declaración “fijada” que unifica casos singulares bajo el nombre de una voz colectiva, creemos que en el panorama actual, donde las estructuras de poder son ubicuas y tienen múltiples capas, la idea anterior del manifesto no puede ser efectiva para responder a las condiciones nuevas. En contraste con la retórica del consenso, donde la voz colectiva oculta singularidades y expresiones libres, decidimos reformular la crítica de confrontación del manifiesto hacia una dimensión “esquizofrénica”, en la que todos los casos pueden ser respetados e incorporados.
A pesar del hecho de ser conscientes de los límites de este discurso con múltiples centros, es importante para nosotras destacar la necesidad de reformar las herramientas de la crítica y las estrategias en las que podríamos pensar para avanzar hacia una práctica más efectiva no sólo en la práctica curatorial, que no deja de ser el enfoque de nuestra investigación, sino también en la producción cultural contemporánea en sentido amplio.
Como resultado de la colaboración con las participantes del primer taller internacional de comisariado que organizó Vessel en 2011, surgió “Not (Yet) Manifesto” -”(Aún) No Manifiesto”. El “(Aún)” arroja luz sobre la idea cambiante de lo que un manifiesto es en estos tiempos, donde la “pluralidad de voces” puede ser considerada en su totalidad, y la “libertad de expresión” debe ser ejercitada como un proceso en marcha. Necesita ser flexible, móvil y adaptable a distintos contextos y perspectivas.
Vessel ya experimentó este formato en Londres a través del evento “God Save Curators?” donde, tras invitar a operadoras culturales, comisarias e investigadoras instigaron una discusión usando como punto de partida algunas de las declaraciones del “manifiesto” y pidiendo a las participantes, virtuales y físicas, que interactuaran y respondieran a ellas. El paso siguiente fue publicar dichos comentarios como marca en el proceso en curso, y para instigar nuevas discusiones.
En Matadero Madrid, Vessel presentó “Not (Yet) a Manifesto” y sorprendentemente dio lugar a una discusión informal entre las participantes. A pesar de que en esta ocasión no hay comentarios oficiales registrados en el manifiesto, el debate nos ayudó a “re-pensarlo” como herramienta y a considerar qué estrategia deberíamos adoptar a continuación.
Os invitamos, como pensadoras activas que viven en el momento actual, a generar ideas juntas para desarrollar un nuevo tipo de posicionamiento en respuesta a los efectos de la producción intangible post-industrial.
[ traducido del inglés de http://www.vesselartproject.org/en/2013/02/02/curatorial-practice-in-convulsive-time/ ]
–
+@:
www.vesselartproject.org
–
2013-02-13
ANTI- Liburudenda, 20:30h
C/ Dos de Mayo, 2. 48003 Bilbao.
El próximo miércoles 13 de febrero, a las 20:30 el historiador Miquel Izard nos presentará su nuevo trabajo publicado por la editorial Virus.
_
“Aquel inverosímil verano del 36 no por esperado resultó menos sorprendente para toda la sociedad catalana y para los que desde fuera de Cataluña pudieron seguir de cerca unos acontecimientos que se desencadenaron de manera trepidante.
La rabia inicial se transformó en furia creadora y, de la noche a la mañana, las convenciones sociales, las formas de producción, las estructuras de decisión y la vida cotidiana anterior saltaron por los aires, y Cataluña entera se puso manos a la obra para construir una sociedad sobre las bases de la libertad y la justicia social. Al contrario de lo que se puede leer en tanta historiografía oficial, no fue Barcelona y no fueron los «murcianos» los únicos protagonistas de la revolución social, fue el conjunto de obreros y campesinos de toda Cataluña los que salieron a la calle y tomaron el futuro en sus manos.
La obra colectivizadora, la expropiación de locales de la burguesía y de la Iglesia para escuelas, comedores y hospitales —además de para sindicatos, partidos y asociaciones—, la creación de comités municipales y de defensa se extendió por toda Cataluña, de manera espontánea, sobrepasando muchas veces a las propias organizaciones obreras y borrando de un plumazo las relaciones de poder anteriores.
También la represión sobre fascistas, algunos elementos de la burguesía o sus colaboradores y sobre el clero se dejó sentir, pero ni ésta fue tan ciega, ni tan numerosa, ni fue obra sólo de incontrolados o de miembros de la CNT. Y, sobre todo, no fue Barcelona donde hubo proporcionalmente más muertos, sino en algunas zonas rurales donde el caciquismo y la Iglesia habían jugado un papel especialmente represivo, como nos demuestra Miquel Izard en su abrumador trabajo: una radiografía de los seis primeros meses de revolución social en Cataluña, a partir de las noticias de la época y los escritos dejados por sus protagonistas y observadores de todo el espectro político —tanto los partidarios como los críticos—, en aquel lejano y extraordinario verano del 36 que unos se esfuerzan por recordar, mientras otros se empeñan en enterrar.Miquel Izard (Barcelona, 1934) fue alumno de Jaume Vicens, Pierre Vilar y Jordi Nadal. Le atrajeron el proletariado y la manufactura algodonera. Tras su exilio a Venezuela (1968) devino americanista investigando el rechazo a la colonización, la forja de ámbitos cimarrones o denunció la Leyenda Apologética y Legitimadora (LAL) sobre la agresión castellana. Jubilado de la UB y sin apoyo institucional, regresó al pasado catalán y, ahora, a la Guerra y la Dictadura, atrapándole las asombrosas mudanzas del verano de 1936. Sigue indagando sobre la Retirada o sobre los chiquillos y mujeres durante los primeros años del franquismo, dos grupos muy perjudicados y ninguneados. Enseñó en las venezolanas ULA de Mérida y UCV de Caracas o en la NYU de Nueva York. Entre sus libros destacan: “El rechazo a la civilización”; “Orejanos, cimarrones y arrochelados”; “El miedo a la Revolución”; o “Patagonia. Crónica de un viaje”.
–
+@:
–
–